Samurai Rebellion sucede en el Japón de 1725, durante una época de paz, donde Isaburo, un samurái veterano, miembro de un clan local, lleva una vida apacible con su hijo y su esposa. Pero un día, su honor y sus principios morales entran en abierto conflicto con los de su clan. El enfrentamiento es inevitable y tendrá inesperadas consecuencias.

Premio FIPRESCI en el Festival de Venecia 1967
Mejor Película – Espiga de Oro en el Festival de Valladolid – Seminci 1967
  • IMDb Rating: 8,3
  • RottenTomatoes: 93%

Película / Subtítulos (Calidad 1080p)

 

Empezamos la entrega de esta semana por todo lo alto, con una de las películas más míticas del cine clásico japonés. Dirigida por el grandísimo Masaki Kobayashi (Harakiri, The Human Condition) y protagonizada por dos de los más grandes actores japoneses de todos los tiempos, Toshiro Mifune (Seven Samurai, Yojimbo, Rashomon) y Tatsuya Nakadai (Harakiri, Ran), Samurai Rebellion (Jôi-uchi: Hairyô tsuma shimatsu) se estrenó en Japón en 1967 y, aunque haya quedado algo opacada por las otras obras maestras del director, sigue siendo considerada a día de hoy una de las mayores obras maestras del cine de samuráis.

Con esta película, Masaki Kobayashi demuestra de nuevo lo grandísimo director que fue, al menos cuando tocaba el género jidaimono (histórico), que es en el que le hemos catado hasta ahora (Harakiri, Samurai Rebellion, Kwaidan). Obviamente, cualquier comparación con su mítica obra maestra Harakiri (Seppuku) sería odiosa, ya que aquella es realmente insuperable, pero no por ello deja de ser este un soberbio filme.

Yendo al grano, Samurai Rebellion es otra gran joya del chanbara, con una dirección y una ambientación espectaculares. Sin duda una de las películas que mejor muestran la temática del honor del samurái, que tan bien se le dio a Kobayashi retratar. Y no solo eso, sino que ilustra con gran detalle y maestría la estructura familiar y jerarquías de un clan samurái de la Era Edo (concretamente a mediados del siglo XVIII), lo cual constituye el elemento fundamental sobre el que se construye la trama de la película.

Las escenas de combates también son espectaculares. No abundan, pues es una película compuesta en su gran mayoría de diálogos, silencios y escenas contemplativas, como es propio del cine más clásico nipón. Es pausada, lenta y toma mucho tiempo para desarrollar los acontecimientos (y lo hace de puta madre, hablando en plata), pero una vez llegado el clímax, Kobayashi ofrece tensas escenas de enfrentamientos katana en mano, entre las que destaca el escalofriante duelo en el monte entre los míticos Mifune y Nakadai.

Y por supuesto, no podemos dejar de destacar el plano interpretativo, pues encontramos a los dos grandes titanes del cine clásico japonés, Toshiro Mifune y Tatsuya Nakadai. Estos dos colosos del Séptimo Arte son rostros más que conocidos del género chanbara, y de hecho trabajaron juntos en varias ocasiones bajo las batutas de otros grandes directores como el mismísimo Akira Kurosawa, de quien fueron sus dos actores fetiche (junto con Takashi Shimura). Si bien en este caso el papel principal recae sobre Mifune, la presencia secundaria de Nakadai redondea de forma soberbia la película.

Samurai Rebellion es una gran obra maestra del cine. Imprescindible para todo amante del buen cine clásico, la cultura japonesa y el chanbara. Brillante. (LaBanderaDeLaLibertad.blogspot.com)